Quizá una de las mejores cosas que nos ha traído la democratización de las redes sociales son los vídeos de recetas: igual que los vídeos de los gatitos —está demostrado que nos alegran los días en ese vertedero que es, habitualmente, Twitter—, los vídeos de recetas, sin duda, nos animan y nos quitan miedos a la hora de meter las manos en la masa en la cocina. Una de estas figuras luminosas, sonrientes y bien conocidas es Marta Sanahuja, más conocida como Delicious Martha. Su blog gastronómico y sus perfiles en redes arrojan cientos de miles de seguidores. Quizá el secreto de su éxito sea su sonrisa constante y la sencillez de sus propuestas culinarias. La cocina no fue su vocación primera, pero sí, definitivamente, el lugar en el que brilla. Marta estudió Publicidad y Relaciones Públicas y se dedicó durante varios años a ello, pero un cambio de rumbo en su vida profesional y personal hizo que la unión de sus dos pasiones, la comunicación y la cocina, se consolidasen en su personal proyecto Delicious Martha. Su blog se llenó de visitas, sus redes aumentaban sus cifras de seguidores rápidamente y fue cuestión de tiempo el que publicase su primer libro en 2021. Un año y medio más tarde, repite experiencia y presenta Delicious Martha. Mis 100 mejores recetas dulces y saladas (Grijalbo, 2022). «Este libro que sostienes en tus manos no es un libro más. No es el segundo libro en dos años. No es un recopilatorio de mis mejores recetas para que las disfrutes con quien más quieras. No es el resultado tras meses de mucho esfuerzo, de recetas fallidas, de pruebas incesantes y de muchos contratiempos. No es una parte más de mí, ni de mi forma de ser ni de vivir. Este libro es muchísimo más. Ha sido mi punto de inflexión», comenta Marta. A propósito del lanzamiento de este libro, charlamos con ella para saber más sobre su historia de éxito.

Leía en la introducción de tu libro que este libro era un punto de inflexión en tu vida, ¿por qué?

El primer libro que hice, el pasado año, hizo que me vaciase totalmente. Di todo lo que podía de mí. Un mes más tarde, me propusieron ir a por el segundo. En ese momento dije que sí, pero cuando faltaban un par de meses para la entrega, me di cuenta de que no sabía qué más aportar. Pedí un break, encontré la paz que necesitaba y empezó a fluir este nuevo libro. Es mucha la presión que nos ponemos encima.

Empezaste tu vida laboral en la publicidad. ¿Qué te llevó a dedicarte a la cocina? ¿Qué te hizo cambiar de rumbo?

Fue un cambio radical, en 2013, cuando estábamos todos en plena crisis económica. Estudié Publicidad y, pocos días después de entregar mi trabajo de fin de grado, ya estaba trabajando como becaria en una agencia. Empecé mi andadura en el mundo laboral esperando una cosa, aunque encontré algo totalmente distinto a lo que esperaba, a lo que había imaginado. Era un trabajo muy demandante. Nunca nada era suficiente, todo lo que hacía lo hacía mal. Tuve un desencuentro importante con mi jefa de entonces que supuso que, en un año, perdiera 19 kilos. Me quedé en los huesos por esta situación de estrés que puso en riesgo mi salud. Mis padres dijeron que debía salir de esta agencia porque vieron que estaba acabando conmigo. Me sacaron de ese infierno, sin saber que era el inicio del fin de mi carrera en Publicidad. Me esforcé por encontrar un nuevo rumbo, por encontrarme a mí misma. Fui dando palos de ciego, entonces: quise empezar Educación Infantil, pero no funcionó. Entré en la cocina para desconectar, pues cuando cocino, el mundo desaparece para mí. Solo somos lo que estoy cocinando y yo. Mi madre vio que mi mundo se paraba por completo mientras cocinaba y me ayudó a encontrar mi espacio y a crear un blog de cocina.

Abrí el blog de cocina y me encantó la experiencia. En aquel momento, los blogs de cocina los hacían señoras con hijos y con mucha experiencia en la cocina. Yo solo hacía dulces y pensé que no había una salida para mí en ese mundo. En ese momento, tú tenías que ir, de manera proactiva, a buscar los blogs de cocina. Instagram todavía no era una ventana al mundo. Pero cuando comenzó a serlo, pasé de publicar fotos con mis amistades a fotos de lo que cocinaba en mi día a día.

¿En qué momento empieza a crecer tu blog y cómo es la gestión de tu página y tus redes? ¿Cómo manejas este éxito?

Cuando empecé, subía cada día tres recetas. ¡Tres recetas! No tenía descanso. Llegó un punto en el que las marcas comenzaron a fijarse en mí, a ver que me estaba moviendo. Cada día subía recetas sin parar para darme a conocer. La primera marca que confió en mí fue Freixenet (después de un año trabajando): me pidieron que preparase tres recetas maridadas con cava… y me dijeron que me iban a pagar. En ese momento, entendí que podría ser un trabajo y tener salida. No existía la profesionalización de creadora de contenidos en redes. A partir de ese momento, fueron apareciendo más marcas interesadas en mi proyecto. Yo no toqué ninguna puerta, en realidad. Fue una rueda cada vez más grande. Ahora publico una video-receta cada día… que no está mal.

¿Todos los días se come bien en tu casa?

Nooo… (risas). Mi vida es un equilibrio constante. Me gusta mucho comer sano, pero también comerme una pizza sin pensar en comer sano. No me llama la atención, por ejemplo, comer un Donut, pero sí hacer unos donuts saludables.

¿Cuál es tu comida o comidas favoritas?

Me encantan los huevos al plato que aparecen en el libro. Es un plato súper versátil, al que puedes añadir lo que quieras. Es un plato de aprovechamiento ideal. Esto en cuanto a receta salada. Si pienso en dulce, me encanta cualquier versión de una tarta de queso. No sé cuántas tartas de queso he llegado a versionar, pero muchísimas. Tengo, de hecho, un e-book dedicado en exclusiva a las tartas de queso. También me encantan los cinnamon rolls.

¿Cómo descubriste que eres una persona PAS (con Alta Sensibilidad)?

Después de todo este tiempo en la agencia de publicidad, estuve yendo a terapia. La terapia me dejó entrever que podría ser una persona PAS, pero no profundicé en su momento. A través de Instagram, conecté con otra mujer PAS y fue ella quien me animó a buscar información sobre esto. Cuando empecé a buscar, absolutamente todo me encajaba. Gracias a que he visibilizado esta condición, en algunos casos, otras personas encuentran sentido a cosas que han pasado en su vida y dejan de sentirse bichos raros.

Me afecta tanto esta condición que no puedo ver la imagen de un perro maltratado en la carretera. Si veo un gato atropellado en el andén de una carretera, me caen unos lagrimones… empatizo demasiado, la verdad. Me emociono con mucha facilidad. No es un don: es un rasgo más de la personalidad que, para muchas cosas es una desventaja, pero para otras es maravilloso. Vivo la vida mucho más intensamente, para lo bueno y para lo malo.

¿Qué es lo que te hace reír? Porque la sonrisa y el buen humor son constantes en tus publicaciones…

Sobre todo, mi pareja. Intento reírme cada día, siempre que puedo. De cara a la gente que me sigue, creo que es muy importante transmitir optimismo: suficientes desgracias tenemos ya en el mundo. Hay días malos, claro, y es algo que también transmito si toca. Sé que una sonrisa es contagiosa, lo tengo demostrado.

LAS RECETAS FAVORITAS DE DELICIOUS MARTHA

Cheesecake de fresa

Ingredientes para la base

80 gr. de anacardos

60 gr. de pasta de dátiles

20 gr. de cacao puro

10 ml. de aceite de coco

Ingredientes para el relleno

5 láminas de gelatina de 2 gr.

50 ml. de bebida vegetal

320 gr. de queso crema light

95 gr. de pasta de dátiles

1 cucharadita de vainilla líquida

200 gr. de fresas

Ingrediente para la cobertura

100 gr. de fresas laminadas

Tritura todos los ingredientes de la base hasta obtener una masa que se pueda compactar. Colócala en el molde previamente forrado con papel vegetal y presiona hasta que quede lisa y consistente.

Para el relleno, hidrata las hojas de gelatina en agua muy fría durante cinco minutos.

Escurre bien y diluye en la leche vegetal hasta que esté totalmente integrada.

Mezcla todos los ingredientes junto a las fresas previamente troceadas. Una vez tengas una textura homogénea, vierte sobre la base y refrigera, como mínimo, cuatro horas.

Para preparar la cobertura, simplemente da forma de corazón a las fresas con la ayuda de un cortapastas.

Huevos al plato

Ingredientes 

3 huevos medianos

Media cebolla

1 cucharada de AOVE

Medio calabacín

Medio pimiento verde

pimiento rojo

Media berenjena

150 gr. de champiñones

400 gr. de tomate triturado

Una pizca de sal

Especias al gusto

Para preparar esta receta, pica la cebolla y ponla en la sartén con un pelín de aceite. Rehoga y añade el calabacín, el pimiento, la berenjena y los champiñones cortados pequeños. Cocina unos diez minutos.

Agrega el tomate y baja el fuego. Deja que se cocine haciendo chup-chup hasta que el tomate coja un colorcito más oscuro. Añade sal y especias a tu gusto.

Por último, rompe los huevos y colócalos encima. Tapa la sartén hasta que se cocinen las claras.

Sirve al momento.

Aún más fáciles, ricas y sanas, Marta nos trae sus elaboraciones preferidas: la mayoría inéditas y alguna mejorada, pero tan maravillosa que merecía ser impresa en tinta.

Este recetario súper sencillo de manejar incluye sustituciones de ingredientes, valores nutricionales, consejos para sacar el máximo partido a tu airfryer y trucos infalibles para darle un twist a todas las preparaciones.

Así como en el primer libro la autora nos contó sus «orígenes», ahora nos explica su evolución culinaria y cómo este nuevo libro ha supuesto un punto de inflexión.