Estela Perdomo nació en Lanzarote y pronto, muy pronto, tuvo clara su vocación: 8 años contaba cuando se subió por primera vez a un escenario y, para sorpresa de todos, interpretó con gran soltura temas de Tina Turner y Edith Piaf. Estela recuerda como el punto de partida. Ahora aterriza en el Teatro Alfil de Madrid para dar vida a Ariana en Baby boom en el paraíso, texto de la dramaturga costarricense Ana Istarú. Ariana es una joven de gran fortaleza, extrovertida y pasional que, tras años de casada y de superar un viejo trauma relacionado con el parto, decide quedarse embarazada. Sin embargo, no le será sencillo. En el viaje que emprende hacia la consecución de su objetivo tendrá que sortear un sinfín de dificultades que harán del recorrido una aventura. Estela, madre de un hijo de 12 años, nos cuenta cómo conviven su pasión por la actuación y su faceta maternal.
¿Cómo era tu trabajo antes de tu maternidad?
Antes podía dedicarme 100% al trabajo, era mi prioridad, tenía muy claros mis objetivos profesionales y disfrutaba con ello.
¿Y después? ¿Sufrió cambios significativos?
Las prioridades cambiaron. Durante un tiempo estuve mucho más condicionada, haciendo malabares para poder gestionar mi vida lo mejor posible, intentando compaginar la demanda de mi trabajo con las nuevas y desconocidas tareas que representaban para mí ser madre. Cuando tienes un hijo desde luego tu vida cambia. Tus objetivos profesionales, para lo que tanto te has preparado y por los que tanto has luchado, se ven afectados. Te sientes culpable por no estar todo el tiempo que consideras adecuado con tu hijo y por no dedicarle lo necesario a tu trabajo. Es una dualidad difícil de llevar. Tienes una perenne lucha interna por no estar al 100% con los dos y el resto de condicionantes sociales.
¿Qué es, para ti, lo mejor y lo peor de la maternidad?
Lo mejor: la maternidad es una increíble experiencia de vida; te sorprendes por tu capacidad de amar y de renunciar a cosas que antes ni se te pasaba por la mente apartar de ti por otra persona. Es todo un viaje emocional que compartes con otro ser humano. Lo mejor es ese amor incondicional. Y lo peor… Diría que, a pesar del siglo en el que vivimos, no se ha hecho un cambio educacional adaptado a la nueva situación de la mujer. Mentalmente, creemos que podemos gestionar las dos cosas, pero al final siempre estamos corriendo para llegar a todo y nos sentimos en falta con las responsabilidades de ser madres y buenas profesionales a la vez.
¿Cuál es el germen de Baby Boom…?
La obra está escrita por Ana Istarú, actriz, poeta, dramaturga costarricense y madre de tres hijas. No puedo hablar en nombre de la autora, pero desde mi punto de vista, y como actriz, el germen de la obra parte de un acto genuino de defensa a las mujeres que son madres frente a ciertas taras que persisten en nuestras sociedades de hoy en día. A pesar de los avances que disfrutamos las nuevas generaciones de mujeres con respecto a lo que significó la vida para nuestras abuelas, todavía falta mucho recorrido por hacer. Especialmente con el hecho de ser madre, y eso lo refleja muy bien el texto. Desde que empiezas con la lectura, es imposible como mujer no empatizar con el viaje que hace Ariana, el personaje principal, para alcanzar su objetivo de ser madre.
Te enfrentas sola al escenario y al público, ¿cómo te sientes cargando sola con este texto?
Confieso que la propuesta de interpretar una obra de teatro yo sola me hizo temblar las piernas. Pero este texto es una maravilla y una oportunidad para compartir con el público parte del viaje de unos progenitores novatos. Para mí es un privilegio tener la oportunidad de interpretar a Ariana, que tiene la valentía de contar su historia, y por ende la de muchas mujeres. Me siento orgullosa de que el teatro sirva en este caso para divertir y también remover conciencia sobre este tema; por tanto, el miedo de estar sola en el escenario desaparece, porque estoy con el público que me acompaña.
¿Qué encontraremos cuando vayamos al teatro a verla?
Con una obra divertidísima y tierna que aborda con mucha sensibilidad varios temas en torno a la maternidad. Pese a ser una comedia en la que la pasas riéndote la mayor parte de la función, también hay momentos para reflexionar sobre varios asuntos tabú relacionados con el embarazo que, por desgracia, continúa padeciendo la sociedad de hoy.
Varios miércoles de noviembre y diciembre
Entradas via web, 16€. En taquilla, 20€.
Teatro Alfil, Calle del Pez, 10. Madrid.